Una vez despejada la incógnita del Presidente del congreso. A Gallardón le quedan dos oportunidades claras de ser ministro: Defensa o Interior.
Para Defensa tendría todos los pronunciamientos: Ministerio clásico pero de perfil bajo y buena aceptación entre la opinión pública. El estamento militar, después de Chacón, estaría dispuesto a casi cualquier cosa. Además el Ministerio de Defensa poco puede gastar y probablemente sufrirá más recortes. Rajoy enviaría un mensaje claro; “Gallardón éste es tu premio de consolación, quiero que seas el “Bono” del PP”.
La otra opción, Interior o Gobernación, es la que más le agrada al todavía alcalde de Madrid: Ministerio de relumbrón y muy bien valorado. La figura de ARG, más querido fuera de Madrid y apreciado por la izquierda y nacionalistas varios, sería una opción de supuesta moderación y consenso que atraería a PRISA y nacionalismos. Opción muy peligrosa para España con delicadísimos frentes abiertos: fin de ETA, 11M, servicios de inteligencia, posible secesión vasca…
Ante esta solución el mensaje de Rajoy también sería claro, sometiéndose a los dictados de la “filantropía” progresista, quedando bien y no haciendo nada, pagando hipotecas ocultas que desconocemos.
Buena forma de empezar a evaluar a Rajoy, no sólo por las medidas económicas.
Confiamos que todo se quede en un susto y el mal menor sea ver a Gallardón vestido de “Alférez” provisional.
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