Río 66 – Madrid 32. No hubo color.
No pudo ser la cabezonada y sin ánimo de hacer más sangre, nuestra postura fue siempre la misma. Pueden ver nuestras entradas anteriores:
Claro que estamos a favor de la celebración de las olimpiadas en Madrid. La cuestión es de oportunidad, buena organización y sensatez. Si, al anterior Madrid 2012 e incluso 2020, pero no 2016.
Todo parte del capricho y aspiraciones de G., que le parecía poco contenido ser sólo alcalde. El quería ser candidato a la Moncloa pero se tuvo que conformar con “repetir” candidatura olímpica, contra consejos y sentido común.
Después de Londres no toca Madrid. Pero la ambición, propaganda, prebendas y promoción de Gallardón… (mayo de 2009)
Lamentable nos parecen la cursilería, las lágrimas, los abrazos empalagosos y la sensiblería facilona y populista de nuestros políticos profesionales (ZP y GETAPE). Totalmente arrobados y arrodillados ante el Dios Olimpo, como forma de ocultar realidad e incapacidad, a sus súbditos.
Ya habrá tiempo para analizar los “oráculos” del faraón; mientras unos anuncian su fin, en el PP de Mariano están acojonados con un Gallardón aburrido y “sin nada que hacer” . Todo es posible con el ciclotímico Alberto.
La derrota de Madrid 2016 tiene dos planos:
Derrota Institucional y mediática. El abuso de las instituciones ha sido exagerado e innecesario. “Hemos venido a salvar el culo a Gallardon”– se oía a alguno de los 400 invitados. Todos en Dinamarca durante días, como si no existieran más problemas. Los medios de comunicación parecidos. Todo sea por rellenar horas de programación con una efímera corazonada.
Derrota económica de Madrid y personal del alcalde. ¿Cuánto ha costado MADRID 2016? ¿600 millones de euros?. ¿A que se dedicó estos años Gallardón? A “seguir y perseguir” a los miembros del COI por todo el mundo. Descuidando, lógicamente sus principales funciones. Orgulloso, soberbio, engreído, imprudente y cabezón. Arrastro a Todos sabiendo que era imposible. Tiene el corazón “podrío”…
…
Urge saber a cuánto asciende el sueño megalómano de este sátrapa consumado. Conocer qué ha costado el show de Copenhague, quién va a pagar los vuelos fletados al efecto, los cientos de invitados a los que, al parecer, se regaló maleta, traje –¡oído cocina, señor Camps!- y corbata, quién ha corrido con la cuenta de hoteles, convites y confetis… Sabemos que hemos sido nosotros, cierto, pero queremos oírlo en boca y con el verbo florido de ese insuperable orador que es Gallardón. (Jesús Cacho)
GallardonNO.com 
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