En lugar de “corrupción urbanística”, hay que utilizar la expresión “corrupción administrativa” o «corrupción» sin más; los implicados son “funcionarios de toda la vida” y se prohíbe citar a Montserrat Corulla, la amiga del alcalde acusada en el Caso Malaya. Así y no de otra forma son las órdenes de la cadena SER para el tratamiento informativo del escándalo del ayuntamiento de Madrid. Una trama organizada que cobraba mordidas a los ciudadanos sin que el regidor, Alberto Ruiz-Gallardón, y sus concejales se percataran del pase de billetes y el frenazo de licencias.
Guerra de Medios
La Guerra del Fútbol se ha gallardoneado. La batalla entre los dos grupos de la izquierda mediática se reproduce también en este caso. Si El País protege al alcalde, El Público lo muerde a conciencia con la voluntad de vincularlo a Corulla en cuanto tenga papeles.
En esta tesis abunda la información publicada por el Extraconficencial, que señala a los próximos de Gallardón como conexiones entre las operaciones Malaya y Guateque.
Mientras, El Mundo arremete contra este político popular que es fuertemente atacado por un sector de la derecha mediática…
Todo aderezado con las críticas del PSOE; Blanco y Rubalcaba contra ARG, que se defiende insinuando que es el PSOE quien tendrá que rendir cuentas
Y el escándalo no ha hecho más que empezar.
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